jueves, 12 de agosto de 2010

La balanza

En la balanza de aire: donde entran las cosas que no caben normalmente: una música de baile, los escépticos y los optimistas, una comida con buen vino (sin ser excelente) y una buena charla que no buscamos sino que nos buscó; Madrid que nos mira de reojo. En la balanza de aire: hacer el ser humano por viejas y grises callejas en medio de un feliz bullicio o frente al mar, donde convergemos (entre las inmensas arenas, bien lo sabemos, de la nostalgia). En la balanza. Un café a media tarde, tú y yo con Pessoa, él nos deja hacer, sombra y silencio, sin decir nada; Deva, un nuevo título para un poema, Alaska 19; desdenes; En la balanza de aire. Un amor que apenas si llegó a ser amor (por ahora); personas que cargan con su fantasma, personas que vienen y se van, personas solemnes, personas en tránsito a ninguna parte; honestidad y coraje; y John Cusack que nos recuerda eso de que el azar es un regalo al que no prestamos la suficiente atención porque se repite cada mañana.

4 comentarios:

  1. Avisa cuando ese "Alaska 19" esté listo, porque parece nacer de un campo bien abonado. Enhorabuena por el post.
    Un abrazo.
    José Havel

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  2. Muchas gracias, José Havel. Por supuesto, se avisará.
    Un abrazo fuerte.

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  3. "A quien como yo, así, viviendo no sabe tener vida, ¿Qué le queda sino, como a mis pocos pares, la renuncia por modo y la contemplación por destino?" ...Gracias por tantas cosas bellas en forma y fondo...preciosa balanza.

    Laura García

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  4. Más preciosa si cabe es la muchacha a la que va dirigida...por atravesar las grietas de mi memoria desde aquellos días de aire y risa.
    Un auténtico honor verte por mis fantasmas.
    Un millón de besos, prima.

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